sábado, 24 de diciembre de 2011

Palabras de Van Gogh...




Cito expresamente a Daumier: las proporciones serán casi arbitrarias, la anatomía y la estructura serán absolutamente malas a los ojos de los académicos. Pero vivirán. Y lo mismo ocurre, sobretodo, con Delacroix... Dile a Serret que me desesperaría si mis figuras fueran buenas, dile que yo no las quiero académicamente correctas, dile que, si se fotografiara a un hombre que cava, ciertamente no cavaría. Dile que yo encuentro las figuras de Miguel Ángel admirables, aunque las piernas decididamente sean demsiado largas, las caderas y los muslos demasiado anchos. Dile que, a mi ojos, Miguel Ángel y Lhermitte son en eso los verdaderos pintores, porque pintan las cosas no como ellas son según un análisis riguroso y seco, sino como ellos -Millet, Lhermitte, Miguel Ángel- las sienten. Dile que mi mayor deseo es aprender a hacer tales inexactitudes, tales anomalías, tales retoques, tales cambios de la realidad que de ella salgan, sí, hombre, mentiras si se quiere, pero más verdaderas que la verdad literal...

Yo conservo de la naturaleza un cierto orden de sucesión y una cierta precisión en la colocación de los tonos, y estudio la naturaleza para no hacer cosas insensatas, para permanecer "razonable"; pero mucho menos me importa que mi color sea precisamente idéntico a la letra, desde el momento en que resulte bello sobre mi lienzo como resulta bello en la vida... Toda esta arquitectura y este cielo son convencionales y subordinados a las figuras, están calculados para hacerlas bellas. Esto es verdaderamente la pintura, y es más bello que la imitación exacta de las cosas mismas... Yo me he entregado durante años casi en vano, y con toda suerte de resultados penosos, al estudio de la naturaleza, a la lucha con la realidad: no lo niego. No quisiera haberme privado de ese error. Quiero reconocer que hubiera sido una locura y una estupidez continuar siempre de la misma manera, pero no que me haya tomado todo este trabajo sin ganancia ninguna... Yo no renuncio a la idea que tengo sobre el retrato, porque es una gran cosa batirse por esto, mostrar a la gente que en ellos hay otra cosa que lo que el fotógrafo con su aparato puede sacar...; prefiero pintar los ojos de los hombres que las catedrales, porque en los ojos hay algo que no existe en las catedrales, aunque éstas sean majestuosas e imponentes; el alma de un hombre, incluso cuando es un pobre mendigo o una chica del arroyo, es más interesante a mi ojos. (Cartas a Teo, entre 1883 y 1886)








No se puede negar que es uno de los grandes genios... =) ¡FELIZ NAVIDAD A TODOS!

sábado, 26 de noviembre de 2011

En tiempos de Miguel Ángel

Hola a todos,


Hoy hablaré sobre un artista fundamental e imprescindible en la Historia del Arte. Se trata de un hombre que deja en el mármol su talento, su pasión, su estética de la belleza, su filosofía neoplatónica, su aspiración hacia lo monumental, sus creencias religiosas; el valor de sus obras está tanto en la forma como en el contenido, en lo visual y en lo conceptual, en su arte y en su escritura, en su pintura y en su escultura, en el amor por la forma humana, por lo masculino, por la naturaleza, por la creación.
Son tantas sus virtudes, es tan grande su arte, es tan importante su aportación, que este artista de alguna forma logró ser inmortal, logró marcar el curso de la historia; No se puede sentir más que admiración, ya que estamos ante un artista innato, un artista calificado de “genio”, un hombre que siente lo que crea, se esmera por hacerlo más sublime, por transmitir más, llegando incluso a romper con la reglas dejando una gran influencia a las generaciones venideras. De modo que, con todas estas características, no podría hablar de otra persona que de Miguel Ángel. No haría falta siquiera decir que es un artista florentino nacido en 1475 y que en toda la primera mitad del siglo XVI desarrollará su arte, evolucionando su técnica de acuerdo con sus ideales y sus creencias.
Mi objetivo hoy es hablar de Miguel Ángel desde otra perspectiva. Analizaré sus ideas estéticas, lo que entiende por belleza para comprender sus obras, y veremos que, al final de su vida, realizará obras que incluso llegaron a influenciar a artistas impresionistas como el escultor Rodin. Por ello, considero que un artista como Miguel Ángel no desentona de la temática que he seguido hasta ahora.
Un aspecto fundamental para entender su arte es que Miguel Ángel concibe el mundo como un escultor; lo que le interesa es la forma sólida y el cuerpo humano como lo único realmente digno de ser representado, de hecho, vemos incluso en su pintura que este aspecto queda reflejado, pues con obras tan célebres como la Capilla Sixtina no vemos otra cosa que cuerpos y, curiosamente, incluso cuerpos masculinos en personajes femeninos. Para Miguel Ángel no hay nada más perfecto y más bello que el cuerpo humano, pero el cuerpo humano masculino. Este aspecto refleja que Miguel Ángel tiene una concepción propia de su tiempo, de la cultura del renacimiento, y que sigue la línea de la filosofía neoplatónica, haciendo referencia también a su posible homosexualidad que pudo haberlo condicionado.
La filosofía neoplatónica decía que el concepto de una obra tenía prioridad sobre la realización, porque ésta presenta imperfecciones. Recordando a Platón, este decía que el arte es engañoso, pues es simplemente imitación de las cosas sensibles, que son, a su vez, copias de la ideas, que son lo realmente verdadero. Con el neoplatonismo, no se rechaza el arte de esta manera, pero se hereda el pensamiento de lo que realmente importa no es lo material, no es lo que vemos, si no lo que entendemos, la idea que ha llegado a nosotros a través de una obra de arte. El arte ahora, no es engañoso, pues el artista tiene una nueva función, se abarca desde un punto de vista diferente. Lo que el artista debe buscar no es la mímesis de la naturaleza propiamente dicha, sino representar lo que hay de Dios en ella. El artista tiene la labor de perfeccionar la propia naturaleza, es considerado un segundo creador después de Dios. Este concepto será fundamental en el Renacimiento, en el pensamiento humanista, el hombre empieza a ser el centro, la medida de todas las cosas, el artista alcanza un alto nivel en la sociedad, ya que pasa a ser un artista intelectual, las artes se ponen al mismo nivel que la lógica, la aritmética o la música.
Con estas ideas, y volviendo a las obras de Miguel Ángel, haremos un recorrido por sus obras para entender bien estos conceptos. En un primer momento, en obras como el famoso David (1501) vemos la clara plasmación de lo que entiende por belleza Miguel Ángel. Si la belleza se encuentra en el cuerpo masculino, aquí no puede estar mejor representada, ya que presenta la belleza juvenil. Vemos también algo fundamental en su expresión, la virtud cívica. Vemos tensión y reposo, fuerza y energía, pero no es un David violento, dominado por sus impulsos o la furia. Vemos el ejercicio de su propia mente, su reflexión ante la situación en la que se encuentra, su planificación para actuar y obtener la gloria.
De esta escultura, avanzando hacia 1550 nos encontramos con las tumbas de Lorenzo y Guiliano de Medici, donde empezaremos a ver ese aspecto neoplatónico de que lo que prima es el concepto. De todos modos, lo que resalta esencialmente en estas esculturas es la gran anatomía que desarrollan, recordando a las figuras de su Juicio Final. Se trata del cuerpo humano en todo su esplendor; en palabras de Miguel Ángel no puede quedar más claro: “La figura humana, creada a imagen y semejanza de Dios, lleva en sí el vestigio de la belleza eterna y es el único objeto verdadero del arte”.
Sin embargo, centrándonos en la idea de que el concepto prima sobre la realización, empezamos a ver en estas figuras algo realmente novedoso e impactante: ninguna de estas figuras está acabada en su totalidad. Una primera explicación a esto que hay que tener en cuenta, es que Miguel Ángel realiza sus esculturas como si salieran del bloque de mármol, saca la figura de la piedra poco a poco como si surgiera de ella. De modo que, a medida que fue madurando, asumiendo el pensamiento humanista sobre la primacía de la idea y su profundo sentimiento religioso, que se acentuó sobre todo ya en sus últimos años de vida, lo que busca no es más que la máxima expresión de las emociones y el alma; y el mayor ejemplo para mostrar este aspecto es su última obra, la Piedad Rondanini (1561-1564). Aquí vemos que el artista llega incluso a abolir toda idea de belleza en aras de la sola espiritualidad. Vemos con una obra inacabada una gran expresión: sufrimiento, amor… Es realmente interesante que en un tiempo en el que las obras inacabadas se consideraban señal de fracaso, Miguel Ángel llegara a tal extremo, a representar de forma tan radical el pensamiento humanista y sus propios sentimientos.
Es curioso como su escultura pudo influenciar a artistas de finales del XIX, principios del XX como Rodin. Está claro que el Impresionismo no considera que el concepto prime sobre la realización, la filosofía que hay detrás es muy distinta, pero el método que se utiliza para ambas es muy parecido. El Pensador (1902) de Rodin nos remonta claramente a Miguel Ángel, ya no por su técnica del inacabado, sino por la propia anatomía de la figura. De todas formas, hay una idea en Rodin que nos puede hacer reflexionar: la imagen es superior al material con el que está construido. En este caso, la “imagen” podría substituir a la palabra “concepto” y la palabra “material” a “realización”. Rodin a lo que se refiere con esto es que independientemente del material que utilice (ya que él trabajaba mucho con materiales pobres como el yeso) la imagen de la obra, lo que se representa, es lo que cuenta. En ambos artistas, vemos que hay un concepto, una idea, una intención, que está por encima de lo que se ve con los propios ojos; con Rodin lo que cuenta es también visual, pero sólo debemos centrarnos en lo que él dice que importa. Y, analizando aún más la influencia de Miguel Ángel, es curioso que Rodin eligiera su estética para representar una actividad intelectual, una actividad de la mente, el propio pensar. ¿Estamos, así pues, ante un artista contemporáneo que nos dirige de nuevo hacia la importancia del concepto? No sería de extrañar, pues ya hemos visto hacia donde se encaminó el arte contemporáneo del s. XX. Lo que llamamos arte conceptual, es aquel que ya se fundamenta en sí mismo, el arte es el propio concepto, no necesitamos de la técnica, de las artes plásticas siquiera. Cualquier objeto sirve para expresar un concepto, la propia filosofía es lo artístico. El arte tal y como lo entendíamos hasta finales del s. XIX deja de existir.
Así pues, creo que todo aquel que contemple y admire a Miguel Ángel sentirá inevitablemente cierta nostalgia por aquellos tiempos en los que el arte abarcaba mucho más que un concepto; hemos desechado el dominio de la propia materia a límites extremos, nuestro poder esta en la mente y ya no- por lo menos en mucha menor medida- en las habilidades técnicas.
Mi intención no es desvalorar el arte contemporáneo de hoy en día; simplemente creo que, de vez en cuando, mirar hacia atrás, ver de lo que somos herederos, reflexionar sobre nuestra historia, sobre el arte que conservamos, sobre las filosofías que nos condujeron hasta aquí, que nos hicieron ser como somos, es algo fundamental. Reflexionar sobre el pasado mirando al futuro y ver si el hombre avanza hacia algo mejor, si cada vez se supera, si progresa… preguntándonos en cuanto al arte qué es lo que está pasando, cuál es el fallo del rechazo general que produce el arte contemporáneo. ¿Es que intentamos ver en obras actuales los méritos de artistas pasados y no sentimos más que frustración al darnos cuenta de que todo ha cambiado? ¿Somos otra generación más que no asimila ni asume el arte de su tiempo? En fin, es curioso todo lo que Miguel Ángel puede aportar, recurriendo al siglo XVI para preguntarnos por el siglo XXI.



HeLaDe

lunes, 26 de septiembre de 2011

Una película impresionista =)



Hoy quiero recomendaros una maravillosa película, Más allá de los sueños (What dreams may come). Se trata de un filme profundamente metafórico y mágico, que habla sobre el cielo y la vida después de la muerte. Considero que tiene algo especial, y que puede gustar tanto a los que creen como a los que no, después de todo, es una película basada en la fantasía.

Lo que más me llamó la atención fueron sus escenas, es el impresionismo hecho película junto a una banda sonora maravillosa :)







Helade

miércoles, 7 de septiembre de 2011

El sueño de la razón produce monstruos....



Después de varios meses, regreso con esta maravillosa litografía de Goya, cuyo título es propio de un libro de filosofía. Francisco de Goya, artista de la era de la Ilustración, no se podría encasillar en un estilo concreto; se considera el iniciador del Romanticismo y el precursor de las vanguardias pictóricas del siglo XX en España. Siempre me he preguntado si eso era decir demasiado; por su técnica y su forma de pintar lo considero totalmente un artista decimonónico, heredero de su tiempo en forma y contenido, con tendencias que se remontan incluso al barroco tardío.

Leyendo sobre la temática de esta obra, se decía que era un anticipo del surrealismo. Evidentemente, lo que quiere decir es que se aproxima a él por el contenido, no por el estilo, pero aun así, cuestiono mucho esa teoría.

“El sueño de la razón produce monstruos”; un título tan extraordinario como la obra, cuyas interpretaciones son varias: el subconsciente de la razón, que libera monstruos mientras duerme, la representación de los monstruos de la sociedad del momento, destacando el poder de la razón sobre las tinieblas de la ignorancia…

Se tratan de teorías que, personalmente, no me parecen una crítica propia a la razón, que es de lo que creo que se trata. Cuando leo “el sueño de la razón produce monstruos”, lo primero que pienso es en el propio cansancio de la razón, no mientras duerme. La Ilustración es una época de glorificación del pensamiento, del ser humano, del saber, de la razón. El cristianismo se hace a un lado, dios deja de ser el centro entorno al cual se organiza la sociedad, aparecen las leyes, el ciudadano, el Estado. Pero, sin embargo, aquello de lo que se alardea, el progreso de la sociedad, fundamentada en la razón, conlleva su peligro. La degeneración del mundo ilustrado, el cansancio de la razón, el desgaste de ese mundo… pueden producir monstruos, hechos de cosas terribles, desde el surgimiento de la Revolución Francesa, el Reinado del Terror, la Guerra de Independencia Española… Se fundamenta en una crítica a la sociedad, víctima de su prosperidad.

Es decir, un período en el que, por debajo del progreso, se ve un mundo negro y caótico, y Goya fue quien de observarlo y plasmarlo en papel, haciendo una dura crítica hasta de la propia monarquía española, en su famoso cuadro de La familia de Carlos IV. Por lo tanto, Goya no puede ser más histórico y realista en su temática, lejos de las representaciones del subconsciente o los sueños…sus obras tienen un sentido visual, una carga realista, un modo romántico y una crítica profunda.







HeLade

viernes, 18 de febrero de 2011

Norman Rockwell, el artista

Queridos lectores,

Esta vez puedo prometer y prometo que este blog tendrá más actividad a lo largo del año, espero que, aunque esté lejos de dar clases magistrales sobre arte, aporte datos curiosos o modos diferentes de entender una obra. Mi única intención, es que este espíritu de amor al arte que nos lleva a que estemos aquí, leyendo blogs enfrente del ordenador, lo compartamos a través de comentarios, artículos e imágenes.


Inicié una temática concentrada en el Impresionismo, pero de ahora en adelante abarcaré asuntos que puedan ser calificados como “impresionantes”.

Así que, sin más rodeos, mi primera entrada del año 2011 será dedicada al artista Norman Rockwell.


En mi caso, este artista era un completo desconocido hasta hace poco. Realmente me llama la atención la poca importancia que se le otorga. He de decir que cuando lo descubrí, no sabía nada de él. La primera impresión fue muy buena. Me impactó el detalle de sus dibujos y la dulzura de los rostros.

A medida que fui descubriendo más obras, me llamó la atención la temática, tan cotidiana, escenas normales de personajes de la calle, ciudadanos que Rockwell observa, capta y congela en pintura, haciendo de ellos obras de arte.

Sin embargo, si uno profundiza en los cuadros… Rockwell no se limita a reflejar un hecho cotidiano; la personalidad del artista está marcada, pues en casi todas las obras podemos ver ironía y humor. Sonreímos al ver los cuadros, tienen gracia, soltura… incluso puede que nos identifiquemos con algún personaje, después de todo… todos hemos vivido alguna escena representada por el artista.




Todas estas cosas, hacen que para mí, Norman Rockwell sea un artista especial y digno de ser reconocido. Estoy en 3º de Historia del Arte y tanto en el instituto como en la facultad este artista no ha sido nunca mencionado.

Leyendo más sobre él, en busca de una explicación de por qué no se le valora como se merece he llegado a una conclusión que voy a desarrollar.

Norman Rockwell fue ilustrador, fotógrafo y pintor estadounidense que desarrolló su actividad aproximadamente entre 1910 y 1978, año de su muerte. Fue una persona con una gran falta de seguridad en sí misma, siempre descontento con sus obras, pensaba que nunca podría llegar a realizar una verdadera obra de arte. La cuestión, es que precisamente en estas fechas, el principio de los años XX el boom de los “ismos” se desarrolló por todo el mundo de una forma escalofriante: el expresionismo, fauvismo, cubismo, dadaísmo, surrealismo… eran los movimientos que se adueñaron del arte. La estética de Rockwell era ya vieja, antigua, poco innovadora y, de algún modo, fue relegado a un segundo plano, realizando numerosos trabajos para revistas y anuncios para Mcdonalds o Coca Cola.


Sin embargo, de una forma inconsciente, creo que ha llegado a ser un artista histórico, que reflejó la sociedad de los años 20 pasando por la II Guerra Mundial… un período difícil que el artista reflejó en el carácter irónico de los personajes, en diferentes comportamientos y situaciones… el arranque de una vida de la que nosotros somos herederos. Una modernidad que actualmente está envejecida… pero que llegó a ser esperanza y futuro para muchos.




Me atrevería a decir que es hasta artista de la moda, un estilo vintage que precisamente ahora, vuelve a recuperarse en las tiendas.


Su estética es conocida, y será copiada hasta la saciedad… Todos hemos visto cuadros de cocina o cajas de galletas con sus características, pero… ¿por qué no es reconocido?

Volviendo al foco de la cuestión… mi respuesta ahora está clara: la historia del arte, al igual que la sociedad de aquella época y él mismo, ha hecho que lo “importante” y lo “destacable” de los primeros años del s. XX hayan sido las vanguardias y no un artista más vinculado al realismo, a la técnica, a las pinceladas vibrantes… que a las novedades de un arte que, irremediablemente, empezará a romper con la propia concepción de arte.




Discusión Van Gogh y Gauguin. El loco del pelo rojo

Monet

Monet

Monet


Arte

Detrás de las obras de arte se encuentran pensamientos, sentimientos, historias...

Es importante ver el arte desde otra perspectiva, analizar en la intención del artista más allá de la técnica... donde se esconden valores, culturas o su propia vida personal.

Impresionarte... espero que os guste.